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Un sofá para tu loft, ¡aprende a decorarlo con encanto!

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Cada vez son más las personas que optan por disfrutar de su descanso diario en un espacio de pequeñas dimensiones. Sin paredes ni limitaciones, los estudios o lofts se han convertido en los hogares de moda del momento, ideales para vivir solos o compartir en pareja.

Una de las principales dificultades que suelen encontrarse a la hora de personalizar este espacio vanguardista es que su superficie está siempre a la vista y no cuenta con delimitaciones. Por este motivo es fundamental que tanto los sofás como los objetos decorativos se escojan teniendo muy en cuenta el estilo de nuestra pequeña casa.

¿Cómo seleccionar el mejor mueble de descanso?

Aunque se trata de un espacio sin obstáculos, mantener el orden y conseguir una buena distribución del loft es fundamental para que salas como la cocina o el dormitorio no se amontonen ni se opriman entre ellas. De ahí que muchas personas opten por colocar la cama o el colchón sobre un altillo, generando así una división de altura que favorezca la creación de este lugar de descanso.

Para no perder intimidad y ganar privacidad, desde el blog de OKSofás también te aconsejamos que incorpores a tu habitación biombos o tabiques de cristal, que preservarán tu sueño durante la noche y le darán al inmueble una mayor sensación de hogar. En cuanto al sofá se refiere, para que éste pueda adaptarse a las pequeñas dimensiones de nuestro loft puede optarse por un mueble modular e intercambiable, que permita convertir este pequeño espacio en una casa especialmente hecha a medida del mejor descanso.

¿Estilo industrial o renovado?

Este tipo de viviendas, cuyo origen se sitúa alrededor de la década de los 50, empezaron a establecerse en las galerías o los desvanes desocupados de la época, por lo que muchos de los lofts originales mantienen un estilo industrial al conservar las antiguas paredes de ladrillo o las vigas del techo al aire. Sin embargo, en la actualidad la mayor parte de estas pequeñas casitas han sido reformadas y trasladadas hacia un estilo mucho más ergonómico, confortable y funcional, en el que piezas como el sofá con chaise longue o el puf adquieren un gran protagonismo a la hora de garantizar el máximo descanso.

El principal objetivo de este tipo de apartamentos es que tanto la selección de los muebles como el diseño de cada uno de los espacios confluyan armónicamente para recrear un lugar cómodo y repleto de bienestar. Si quieres ahorrar tiempo y ganar metros, desde el blog de OKSofás te recomendamos que apuestes por la adquisición de un sofá cama, un mueble muy versátil, apto para ser colocado en cualquier rincón y capaz de garantizar una increíble experiencia de descanso.

 

 

¿Sofás, sillones o cojines? ¡Sorpréndela el Día de la Madre!

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Si todavía no sabes cómo impresionarla pero quieres volver a acertar con el regalo, una de las mejores opciones para recompensar toda su dedicación es la apuesta por un mueble de descanso.

A diferencia de otro tipo de celebraciones, el Día de la Madre, que como cada año coincide con el primer domingo de mayo, constituye una ocasión muy acertada para adquirir un sillón relax.

Gracias a su versatilidad y a su capacidad para adaptarse a toda clase de necesidad, este regalo puede mejorar en pocos días la calidad de vida de cualquier hogar. Desde OKSofás te enseñamos qué accesorios permiten personalizar la butaca y qué otros complementos de descanso pueden ayudar a recrear un buen espacio de confort para tu madre.

Reduce su estrés y elimina su tensión corporal

Si por algo se caracterizan este tipo de asientos es precisamente por su capacidad de mejorar la sensación de bienestar de cualquier persona. Sus prestaciones pueden alcanzar límites insospechables, teniendo en cuenta que muchos de ellos incorporan a su estructura eficaces mecanismos capaces de relajar nuestra postura corporal con un cálido y reconfortante masaje.

Ideales para el trabajo o para completar el descanso que nos proporciona nuestro sofá, esta clase de sillones relax generan movimientos circulares sobre la zona de la espalda, eliminando toda la tensión que se acumula en el cuerpo a lo largo del día y que provoca los tan habituales dolores musculares. Además, la mayor parte de butacas con masaje también contienen una vibración especial para relajar la zona de los glúteos y los muslos, mejorando la microcirculación de esta área y eliminando en pocos minutos el efecto de las piernas cansadas.

Cojines masajeadores, el mejor complemento para el sofá

Perfeccionar la calidad del descanso de tu hogar es cuestión de acertar en la elección de los accesorios para el sofá. En la actualidad, existen muchos tipos de productos que pueden ofrecer las máximas prestaciones de confort, convirtiéndose así en herramientas muy útiles para garantizar un buen reposo diario. Con la adquisición de cojines masajeadores para el sofá no sólo sorprenderás a tu madre en uno de los días más especiales del año, sino que conseguirás que al sentarse en su diván experimente una verdadera sensación de descanso. La particularidad de este tipo de complemento es que consigue destensar zonas muy puntuales del cuerpo, permitiendo que los dolores se eliminen rápidamente y recreando un espacio de descanso a la altura del que cualquier madre se merece.

 

¿Cómo sentarse en un sofá de manera saludable?

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Mantener una posición adecuada de la espalda es sinónimo de sentirse bien. Cuando nos sentamos correctamente conseguimos que nuestro sistema respiratorio trabaje a pleno pulmón, garantizando que los músculos reciban menos tensión a lo largo del día.

Aprender a adoptar una sentada saludable sobre el sofá es fácil y sencillo si prestamos la atención adecuada, ya que resulta indispensable que el cuerpo conserve siempre una postura alineada y simétrica. De este tipo de factores dependerá que a la larga la experiencia sobre nuestro sofá sea tan cómoda como deseamos, garantizado al máximo la sensación de bienestar.

¿Qué entendemos por buena postura?

La clave para conseguir que la posición adoptada sobre el sofá sea la más adecuada posible es repartir de forma correcta el peso de nuestro cuerpo, que es el que genera mayor presión sobre los músculos y acaba provocando los tan habituales dolores lumbares o cervicales. Para tener una buena postura del tronco es fundamental que ésta sea dinámica, desarrollando una posición en forma de S que reparta la tensión de nuestro organismo. De esta forma, la columna adquiere una colocación alineada y natural, respetando que la zona dorsal se aposente ligeramente hacia fuera.

Con los pies pegados al suelo, las piernas en ángulo recto y las rodillas separadas y situadas según la anchura de la cadera aligeramos la presión muscular, dando lugar a una curvatura de la espina dorsal que favorece la comodidad de la sentada de nuestro sofá. Además, gracias a esta postura, la zona lumbar puede protegerse con mayor eficacia, ya que la parte baja de la espalda queda completamente apoyada sobre el respaldo.

¿Pueden controlarse las tensiones?

Sentarse o tumbarse sobre el sofá sin prestar atención a la posición que ha adoptado nuestro cuerpo es una acción de lo más habitual. Sin embargo, para evitar que zonas tan delicadas como las cervicales o las lumbares sufran tensiones indeseadas, es fundamental que controlemos nuestra postura y tomemos cierta conciencia corporal.

Comprobar a diario si alguna de las partes de nuestro cuerpo está más rígida de lo habitual es indispensable para entender por qué tenemos dolores o molestias musculares. Además, desde el blog de OKSofás te recomendamos cambiar de postura con frecuencia, ya que la mayor parte de las tensiones derivan del hecho de permanecer durante mucho tiempo en una misma posición. Sentarse sobre una pierna o apoyarse sobre un solo brazo son posiciones que no favorecen nada el buen equilibrio de nuestro cuerpo.

Cojines de sofá, ¡los aliados de la decoración de tu casa!

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Mejorar la imagen de tu hogar sólo requiere de versatilidad, buen gusto y mucho toque personal. Por este motivo el cojín configura uno de los accesorios que suelen utilizarse con mayor frecuencia a la hora transformar con gracia el aspecto del salón, aportando a cualquier ambiente una gran dosis de color, textura y energía.

Jugar con los estampados, las tonalidades e incluso con las formas puede resultar muy útil en este sentido, sobre todo teniendo en cuenta que el estilo debe combinar a la perfección con la estructura de nuestro sofá. Desde el blog de OKSofás te enseñamos cómo un simple cojín es capaz de convertirse en la clave del éxito de la ornamentación de tu espacio de descanso.

¿Asientos amplios? ¡Cojines grandes!

Se trata de una regla lógica e indiscutible: a mayores dimensiones del sofá más posibilidades de decoración. Con proporción, equilibrio y medida pueden incorporarse cojines de gran tamaño que rellenen el amplio asiento de tu mueble de descanso, aprovechando esta oportunidad para combinar estampados o formas arriesgadas que te ayuden a desterrar la rutina del cojín cuadrado. ¡Las flores, las rayas y los cuadros están de moda!

Equilibrio y naturalidad, reflejo de un buen espacio de descanso

Si el estilo de tu comedor es mucho más conservador, la mejor solución para realizar un pequeño cambio decorativo es el uso de cojines con colores neutros, que equilibren la tonalidad de toda la habitación y sin sobresalir demasiado consigan complementar el protagonismo estético de tu sofá. La armonía y la estabilidad de tu mueble de descanso estarán aseguradas si su imagen final refleja toda la naturalidad posible, combinando cojines asimétricos y de diferentes tamaños.

Texturas y tejidos de doble cara

El sofá es casi siempre el centro de atención de cualquier salón, principalmente porque resulta un objeto muy visible y en él transcurren muchos de nuestros momentos de descanso diarios. Si recurres al uso de diferentes texturas, como por ejemplo la pana o el cuero, tu sofá adquirirá un aspecto mucho más dinámico y moderno. Además, para conseguir que la transformación decorativa pueda llevarse a cabo con frecuencia y sin gastar demasiado, desde el blog de OKSofás te recomendamos optar por la compra de fundas de cojín de doble cara, que te permitirán transformar el aspecto de tu sofá siempre que te apetezca.

Mini sofás: ¡muebles a medida para la habitación de tus hijos!

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La mayor parte de las familias cuentan con lugares destinados única y exclusivamente a favorecer el descanso de su hogar. Sin embargo, muchas de estas viviendas olvidan preparar una zona especial para los más pequeños de la casa, que también necesitan contar con un espacio personalizado y un sofá sobre el que poder sentarse a leer, acabar los deberes o jugar con otros amigos.

Una de las últimas novedades decorativas rescatadas de la fabricación de este tipo de productos proviene de la creación de muebles de descanso pensados para niños, con dimensiones mucho más reducidas de lo habitual y perfectamente ideados para garantizar sus necesidades diarias. Descubre desde el blog de OKSofás cómo los sillones diminutos, las camas casitas o las mesitas pequeñas pueden convertir la habitación de tus hijos en un lugar de ensueño.

¿Qué mobiliario en miniatura necesitas?

Lo esencial en este tipo de decoraciones es que aporten a la habitación un resultado divertido, risueño y realista. Por este motivo la mayor parte de mini sofás que a día de hoy se fabrican para niños tienen el mismo aspecto que el mobiliario para adultos, sólo que con un tamaño adecuado para mejorar la sentada y la posición de su espalda. Escoger un estampado atrevido con colores vivos y de temporada puede transformar la pequeña sala de descanso en un espacio cómodo y desenfadado, ideal para asegurar que tus hijos cuenten con un sofá y con una habitación hecha a medida. Para completar al máximo este escenario de cuento es recomendable adquirir mesitas y sillones que se adecuen a la edad de los niños, combinando estos accesorios con otros elementos decorativos como los cojines, los pufs, los cuadros o los estampados infantiles para empapelar la pared.

¡Convierte su cama en una casita!

Otra de las opciones más recurrentes a la hora de garantizar el buen descanso de tus hijos sin perder la magia que su día a día necesita es el montaje de una cama muy particular. En la actualidad, existen muchos módulos que recrean una verdadera casita de cuento, en la que los niños pueden jugar y descansar al mismo tiempo. Este tipo de muebles suelen contar con dos niveles diferentes, situando el colchón en la parte de arriba y accediendo mediante una pequeña escalera de madera. Puede aprovecharse la parte de abajo para colocar un escritorio, un mini sofá o un arcón en el que poder guardar todos sus juguetes.

Fundas de sofá, ¿qué revestimiento necesitas?

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Al tapizar cualquier tipo de sofá, una de las mejores opciones para proteger su tejido, evitar que se dañe y aumentar su durabilidad es el uso de fundas.

Además de conseguir cubrir los asientos, los respaldos y los reposabrazos, en la actualidad este tipo de coberturas son ideales para mejorar el aspecto estético de los sofás viejos y anticuados, dando un toque de modernidad a la habitación y adaptándose continuamente a las nuevas tendencias estéticas.

No obstante, en función del tipo de sofá que se tenga, es recomendable escoger una u otra clase de fundas, que variarán tanto en cuestiones de elasticidad como de comodidad. Conoce desde el blog de OKSofás cómo puedes cubrir tu lugar de reposo diario para que éste esté en perfectas condiciones a cualquier hora del día.

Las fundas elásticas, una protección rápida y eficaz

Cubren la totalidad del sofá, aportan una gran durabilidad y quedan perfectamente ajustadas a la estructura del asiento, sobre todo si éste incorpora cojines desmontables. La propia funda está conformada por una piel elástica interna, que permite introducir la pieza del sofá y acoplarse a la perfección a su forma y dimensión.

A diferencia de las fundas elásticas, que aportan una flexibilidad horizontal, las multielásticas también mejoran su adaptabilidad vertical, por lo que resultan muy recomendables para los sofás de piel o con asientos fijos que no son desmontables ni pueden retirar sus piezas. Este tipo de fundas también son ideales para aquellos asientos con reposabrazos muy voluminosos.

Fundas independientes para tu chaise longue

Si tu sofá cuenta con varias piezas pero quieres seguir garantizando su máxima protección la mejor opción para cubrir el chaise longue es el uso de fundas independientes, que revestirán por separado los brazos, la parte central del asiento y el respaldo. Además, en la actualidad existen fundas adaptables a casi cualquier tipo de sofá, como por ejemplo los sistemas dúo, que permiten tapar por separado la estructura y los cojines, o los salvasofás, muy adecuados para los asientos de líneas rectas o irregulares.

Fundas lavables, una para cada estación

En la actualidad, cambiar la decoración de tu salón cada vez que te apetezca es más fácil que nunca. Y es que gracias a sus propiedades, la mayor parte de fundas para sofá pueden lavarse tantas veces como se necesite. De hecho, uno de los objetivos principales de este tipo de telas de cobertura es precisamente el de evitar que el tejido original de tu sofá se manche, por lo que además de garantizar una decoración diferente para cada tipo de estación mantiene intacta la naturalidad del tapizado o de la piel.

Historia de tu sofá, del Antiguo Egipto a la industrialización

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Junto a la evolución de la sociedad, son muchas las costumbres o las tradiciones que a lo largo de los años han ido cogiendo forma hasta desarrollar nuestra rutina diaria. Entre ellas podría situarse sin duda alguna la práctica del descanso, que ha acompañado a un sinfín de generaciones hasta desembocar en lo que a día de hoy conocemos como confort y comodidad.

Si nos introducimos en la búsqueda de los orígenes de un objeto de bienestar tan común como el sofá, descubrimos que sus raíces van mucho más allá de lo que alcanza nuestra memoria. Y es que la historia de este mueble, ya destinado a favorecer el descanso durante la antigüedad, se remonta a un pasado de tronos, clases sociales y muchas tardes de té.

Opulencia egipcia y funcionalidad romana

La mayor parte de fuentes históricas sitúan el origen del sofá en el Antiguo Egipto, ya que sus mandatarios aprovechaban la exuberancia de este mueble de estilo para marcar su posición social. La creación de los tronos y de las poltronas reales marca el origen de este tipo de descanso, que con los años evoluciona hasta adquirir formas y usos mucho más parecidos al que podemos darle a nuestro sofá a día de hoy.

El cambio de mentalidad en cuanto a practicidad y confort se refiere tiene lugar durante la época romana, en la que este tipo de piezas para el hogar, que aún siguen perteneciendo a los estratos sociales más altos, empiezan a utilizarse de un modo mucho más habitual y diario. La visión utilitaria de este mobiliario dota a su estructura de asiento y respaldo y lo sitúa alrededor de una mesa para poder descansar al mismo tiempo que se come, asemejándose cada vez más a lo que hoy en día conocemos como sofá.

Del artesano a la industria, la extensión del uso del sofá

Durante el siglo XVI, gracias a la prospección de la técnica artesana, tuvo lugar una explosión de calidad en la confección de este tipo de divanes, sobre todo por la naturalidad de sus maderas y la elegancia de sus tapizados. El uso de tejidos como el terciopelo o el cuero, de elevado coste económico, convirtieron al sofá en un producto ostentoso y de clase alta. Sin embargo, con la llegada de la industrialización y la reducción del precio de los materiales con los que se fabricaban este tipo de muebles, el sofá se transformó en un lujo popular, pudiendo acceder cada vez a más hogares y transformándose en la actualidad en una pieza indispensable para el descanso de muchas familias.

Tipos de rellenos para sofás

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A diferencia de otro tipo de muebles para el hogar, el aspecto o el estilo decorativo con el que ha sido fabricado el sofá no debería convertirse en el único elemento de referencia a la hora de decidirse por uno u otro modelo. Y es que cuando se habla de confort, tanto el relleno del respaldo como el del asiento dan lugar a una de las características más necesarias para garantizar el máximo relax de tu reposo diario.

Según el tipo de composición que incorpore el asiento, éste se adaptará de una forma u otra a la estructura del cuerpo, proporcionándonos así toda la ergonomía que nuestra espalda o nuestras piernas necesitan. Conoce de la mano del blog de OKSofás con qué tipo de rellenos puede estar fabricado tu sofá, teniendo en cuenta qué ventajas y desventajas te ofrece cada uno de ellos en materia de descanso.

¿Pluma o espuma?

Parte de la calidad que desprende nuestro sofá depende única y exclusivamente de su interior. Por este motivo resulta tan importante escoger materiales que refuercen la estructura del asiento o del respaldo desde dentro. Mientras que la pluma constituye uno de los rellenos más cómodos que existen en la actualidad, también es cierto que su coste puede disparar el precio final del sofá, por lo que muchas personas optan por utilizar rellenos de espuma, que son mucho más baratos.

Además, la pluma puede deformarse con el tiempo, llegando a perder su volumen original. Aunque la espuma es duradera y se recupera con mejor facilidad, lo cierto es que en materia de confort resulta un elemento poco adaptable y duro, por lo que muchas personas optan por utilizarla para el asiento y escogen la pluma para la zona del respaldo.

¿Híbridos o sintéticos?

En la actualidad, el relleno sintético se utiliza con mayor frecuencia para conformar el acolchado del sofá, sobre todo porque gracias al mismo se obtiene un resultado blando y mullido. El relleno híbrido, que está envuelto con dos capas exteriores de plumas naturales o de poliéster, convierte la espuma en un material mucho más cómodo y nada deformable. Si tenéis pensado utilizar el sofá con mucha frecuencia, una de las opciones más recurridas a la hora de rellenar la parte del asiento es la gomaespuma de calidad, cuya densidad puede proporcionar un descanso adecuado y con un mantenimiento mínimo.