Quedan pocos días para dar la bienvenida al invierno y, con él, al frío y los días lluviosos. Es ahora, cuando más apetece llegar a casa y disfrutar de un salón cálido y acogedor en el que huir del frío de la calle y relajarte con la familia.
Te ayudamos con unos pequeños consejos para conseguir un salón más envolvente para pasar los días de invierno lejos del ambiente gélido del invierno.
- Añade una alfombra
Una alfombra ayuda a dar calidez al suelo, sobre todo si se trata de un suelo frío, como los de mármol o piedra. También te ayudará a dar un toque de protagonismo a una zona del salón y a separar ambientes, como por ejemplo la parte de sala de estar y la parte del comedor.
Las alfombras de fibras son la mejor opción, si la escoges en colores tierra u ocres, añadirás ese toque de calidez y naturalidad a la estancia. Otra opción son las alfombras de lana, que son cálidas en invierno y frescas en verano. No te recomendamos las de pelo largo, ya que acumulan mucho polvo y son complicadas de mantener limpias y en perfecto estado.
- Colores y texturas
Uno de los elementos en decoración más útiles para crear ambientes cálidos y confortables son las texturas y los colores.
Una de las mejores texturas para ganar calidez en el salón es el mohair. Su pelo largo y su suavidad, convierten las mantas de mohair en el complemento perfecto para abrigar el sofá.
En cuanto a estampados, el diseño de moda para todo el año son los cuadros. En invierno, opta por cuadros rojos y verdes, con un estilo inglés. Para el verano, escoge cuadros vichy en tonos pastel. Lo importante es combinarlo siempre con telas lisas de los mismos colores.
Las combinaciones monocromáticas son las que transmiten orden y son las más agradables a la vista. Por eso, escoge siempre una tela de referencia y a partir de esta elige todas las demás, de manera que tengan la misma gama cromática.