Cuando los únicos recursos que tienes son una tabla de surf y una furgoneta, un sofá se convierte en algo tan confortable como la mejor cama del mundo. Eso es lo que desde hace años se han encontrado los surfistas de todo el mundo. Y es que el CoachSurfing nació como sistema de intercambio de alojamiento (sofá) entre surfistas que no se conocían, pero se prestaban alojamiento para poder coger las mejores olas por todo el mundo. Así, un surfista se alojaba en casa de otro y compartían aficiones y experiencias y de ahí surgía una grata amistad.
Actualmente el CouchSurfing es un intercambio de cultura entre dos personas, en el que una presta alojamiento a la otra y a cambio comparten aficiones y cultura y se conocen. No se trata de simplemente ir a visitar un lugar y tener alojamiento gratuito. En el momento en que un hoster (persona que aloja) acepta al surfer (persona que va a alojarse), éste pasa a ser su invitado y debe mostrarle la realidad de su ciudad y de su cultura.
Es una manera genial de descubrir un destino de la mano de una persona local, descubriendo la realidad de la zona, integrándote en el entorno y en su manera de vivir.
Su funcionamiento es muy sencillo y seguro. Todos los usuarios que se registran en la plataforma oficial (www.couchsurfing.org) pasan a ser directamente hosters, aunque tienen la opción de cambiar su estado para avisar si están de viaje o para solo tomar cafés y visitar la zona si en ese momento no pueden alojar a nadie. Así pues, en la plataforma también puedes encontrar gente local con la que ir a conocer el destino y tomar algo, compartir experiencias y conocer la cultura cuando tu hoster esté trabajando o no pueda acompañarte.
Si estás buscando un lugar en el que alojarte también es bien sencillo. Debes rellenar correctamente tu perfil para que los hosters puedan conocerte y fiarse de ti. La gente confía cuando tienes buenas valoraciones, así que al principio puede ser un poco complicado, pero seguro que lo consigues si rellenas tu perfil con información que al hoster le sea útil. Cuando encuentres alojamientos que te interesen solo deberás enviar un mensaje al hoster explicándole porque quieres visitar esa zona, tus intereses y aficiones y qué quieres que te enseñe y te cuente de su ciudad.
Cuando el hoster acepte tu solicitud, tan solo tendrás que viajar al destino y disfrutar de la experiencia. Se recomienda estar allí 3-4 días, ni mucho ni poco, el tiempo suficiente para conocer el destino sin causarle muchas molestias al hoster, que seguramente esté trabajando o con sus tareas cotidianas.
Por último, recuerda que en el momento en que un hoster te acepta, pasas a ser su invitado. Es recomendable que te intereses por sus gustos y le lleves un regalo típico de tu ciudad, como algo de comida que puedas trasladar hasta allí o bien imanes de tu ciudad, para que le quede un recuerdo de tu paso por su hogar.
Si te animas a viajar de una manera distinta para conocer tu destino con una persona local, ya sabes cómo hacerlo. ¡Si vives la experiencia del CouchSurfing no dudes en contárnosla!
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