A la hora de comprar un sofá es muy importante que nos resulte cómodo. La comodidad es muy subjetiva y depende del cuerpo de cada uno, por eso es importante que antes de comprar el sofá lo pruebes y notes que la acogida del cuello y de la espalda son adecuadas para ti.
Modelo Romo OKSofás
Muchas veces nos dejamos llevar más por el diseño y la moda a la hora de elegir un modelo u otro, pero si le vamos a dar un uso diario y, sobretodo, si sufrimos de la espalda, debemos tener en cuenta los aspectos de ergonomía y comodidad para así disfrutar más de los ratos que pasemos en él, ya sea viendo la televisión, descansando o hablando con la familia.
Los sofás y butacas con sistema relax permiten una acogida más correcta de nuestro cuerpo, ya que podemos reclinar los asientos y elevar las piernas, para que nuestro cuerpo se adapte mejor y nuestra postura sea más cómoda y correcta. Un sofá muy recto y rígido no nos facilitará el descanso y nos será más difícil mantener una buena postura en él.
Brazo siesta
Los brazos del sofá también juegan un papel importante en la comodidad de un sofá. En un principio, los brazos más cómodos son los blandos, también llamados brazo siesta. Este tipo de brazos nos permitirán también podernos recostar y apoyar la cabeza sin necesidad de usar cojines.
El tipo de relleno de los asientos y respaldos también es uno de los elementos que hay que considerar para conseguir un sofá más cómodo. Existen distintos tipos de relleno, pero la mejor opción es probarlos y consultarlo con un experto para saber cuál es el que se adapta mejor a nuestro cuerpo, ya que dependerá de nuestra fisionomía y nuestro peso.
Esperamos que con estos consejos os sea mucho más fácil encontrar un buen sofá, cómodo y que se adapte a vuestro cuerpo, para evitar las malas posturas y los dolores de espalda.
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